Ayude a su niño a aprender a leer
¡Los bebés pueden disfrutar de los libros desde los seis meses de edad! Leyendo juntos, su niño aprenderá a amar las palabras y los libros.
Desde el nacimiento hasta la edad de un año
- Juegue con su bebé lo más que pueda. Hable, cante con rimas. Esto le ayudará a aprender a hablar.
- Hable con su bebé y mírelo a los ojos. Dele tiempo para responder en su lenguaje de bebé.
- Dele a su bebé libros de cartón grueso para que los mire. No importa si se los mete en la boca.
- Muéstrele a su bebé libros con dibujos. Mencione los nombres de los objetos. Diga, “¡mira el bebé!” o “¡mira el perrito!”.
- A los bebés les gustan los libros con fotos de bebés y objetos comunes como los animales y los juguetes.
- Siente a su bebé sobre sus piernas y léale en voz alta. Puede ser que su bebé no entienda la historia. Aún así, le encantará el sonido de su voz y estar cerca de usted.
- No deje que su bebé mire televisión sino hasta que sea mayor de dos años.
De uno a tres años de edad
- Léale a su niño todos los días. Deje que su niño escoja el libro. ¡Incluso, está bien si escoge el mismo libro una y otra vez!
- A los niños pequeños (de uno a dos años) les gustan los libros con fotos de niños haciendo actividades diarias y comunes. (Por ejemplo, niños comiendo y jugando).
También les gustan los libros para dar las “buenas noches” y los libros con rimas. Los libros deben tener pocas palabras en cada página.
- A los niños más grandes (de dos a tres años) les gustan los libros con páginas de papel. Les encantan los libros con rimas y palabras que se repiten. Los libros sobre familias, amigos, animales y carritos también son buenos.
- Deje que su niño le “lea” nombrando cosas de su libro o inventando su propio cuento.
- Lleve a su niño a la biblioteca. ¡Celebre cuando él reciba su tarjeta de la biblioteca!
- Siga hablándole, cantándole, diciéndole rimas y jugando con él.
Consejos para leer
- Haga tiempo cada día para leer juntos. Leer de noche ayuda al niño a prepararse para dormir.
- Ponga los libros al alcance de su niño para que los disfrute a solas. ¡Sólo necesita una buena luz!
- Lea libros que su niño disfruta. Su niño puede aprenderse las palabras de su libro favorito. Lean las palabras por turnos. También, dejen que su niño termine las frases en cada página.
- No le exija que aprenda letras, números, colores, formas o palabras. Al contrario, haga que todo sea sólo un juego, ¡y verá cómo aprende jugando!
De tres a cinco años de edad
- Lea libros sobre las letras del alfabeto con su niño. Señale las letras a medida que las lee.
- A los niños preescolares les gustan los libros que cuentan historias. También les encantan los libros con números, rimas y palabras que se pueden aprender de memoria.
- Ayude a que su niño también reconozca palabras completas. Muéstrele la señal de pare (“stop”) o el letrero del nombre de su tienda favorita.
- Hágale preguntas sobre los dibujos y las historias. Invítelo a inventar un cuento sobre los dibujos del libro.
- Algunos programas públicos de televisión, videos y juegos de computadora pueden ayudar a su niño a aprender a leer. Pero usted también necesita participar. Vean los juegos juntos y hablen sobre ellos. Limite el tiempo de ver televisión a una o dos horas al día. Evite programas o películas de violencia.
- Intente ver solamente programas educativos.
- Dele a su niño muchas oportunidades para usar palabras escritas. Escriban las listas para las compras. Escriban cartas para los amigos o familiares.
Lea en voz alta con su niño
Leer en voz alta es una de las mejores maneras de ayudar a su niño a aprender a leer. Entre más divertida se muestre usted al leer el libro, más lo disfrutará su niño.
- ¡Haga voces graciosas y sonidos de animales!
- Miren los dibujos. Pida a su niño que le diga los nombres de las cosas en los dibujos.
- Hablen de cómo los dibujos se relacionan con la historia. Pregúntele qué está sucediendo en la historia. Invite a su niño a participar cuando una línea se repita varias veces.
- Platique con su niño sobre cómo lo leído se relaciona con su vida diaria.
- Si su niño le hace una pregunta, deténgase y respóndala. Los libros pueden ayudar a los niños a expresar sus pensamientos y resolver sus problemas.
- Siga leyéndole incluso cuando ya haya aprendido a leer. Los niños pueden escuchar y comprender historias más difíciles de las que pueden leer por sí mismos.
Escuche a su niño leer en voz alta
Después de que su niño empiece a leer, haga que le lea en voz alta. Lean las palabras por turnos.
Si su niño le pide ayuda con una palabra, léala de inmediato. Pero deje que su niño deletree las palabras si desea hacerlo.
Preste atención para darse cuenta de cuando su niño ya leyó lo suficiente. Pare de leer si su niño está cansado o frustrado.
Sobre todo, ¡festéjelo mucho! ¡Usted es la primera maestra de su niño y quizás la más importante!
La “American Academy of Pediatrics (AAP)” agradece la ayuda del programa Leyendo Juntos (“Reach Out and Read”) para la elaboración de este folleto. “Reach Out and Read” trabaja con los doctores de los niños para ayudar a promover el alfabetismo y distribuir libros como parte del cuidado de salud básico para los niños.
Este programa está apoyado por la AAP. Para conocer más acerca de “Reach Out and Read”, visite la página en el Internet www.reachoutandread.org
Derechos de autor © 2008