Todos los bebés nacen con la necesidad de succionar. Esto es importante porque los bebés necesitan el reflejo de succión para comer y beber. Para algunos bebés, la succión también puede tener un efecto relajante y tranquilizante. Sin embargo, ¿cuándo la succión se convierte en un problema?
Continúe leyendo para obtener información de American Academy of Pediatrics sobre chupetes, cuándo el uso del chupete y la succión del pulgar y de los dedos podría convertirse en un problema, y cómo ayudar a su hijo a dejar de usar el chupete o de succionarse el pulgar o los dedos.
¿Qué debo saber antes de ofrecer un chupete?
Si su bebé quiere succionar más de lo que le proporciona el amamantamiento o el biberón, un chupete puede satisfacer esa necesidad. Antes de ofrecer un chupete, recuerde los siguientes consejos:
- Ofrézcale un chupete a la hora de la siesta y a la hora de acostarse. Esto ayuda a disminuir el riesgo de que se produzca el síndrome de muerte súbita del lactante (sudden infant death syndrome, SIDS). Si está amamantando, espere a que la lactancia se realice sin problemas antes de ofrecer un chupete. Esto generalmente lleva alrededor de 3 a 4 semanas.
- No utilice un chupete para remplazar o retrasar las comidas. Solamente ofrézcalo cuando esté segura de que su bebé no tenga hambre.
- No obligue a su bebé a usar el chupete si no lo quiere.
- Nunca ate un chupete a la cuna o al cuello o a la mano de su hijo. Esto es muy peligroso y podría causar lesiones graves e incluso la muerte.
- Esté preparada para despertarse durante la noche. Si su hijo depende de un chupete para quedarse dormido a la noche, es posible que se despierte cuando se le caiga el chupete. Si su hijo es muy pequeño para volver a colocárselo en su boca o no puede encontrarlo o alcanzarlo si se cayó de la cuna, posiblemente usted tenga que despertarse y alcanzárselo.
¿Qué debo tener en cuenta al comprar un chupete?
- Los chupetes vienen en diferentes tamaños. También encontrará una variedad de formas de tetinas, desde versiones casi cuadradas “de ortodoncia” hasta del tipo de biberón estándar. Pruebe con distintos tipos hasta que encuentre el que prefiera su bebé.
- Busque un modelo de 1 pieza que tenga una tetina blanda (algunos modelos se pueden partir en 2 partes).
- El protector debe tener al menos 1½ pulgada de ancho para que un bebé no pueda colocarse el chupete entero en la boca. Además, el protector debe estar hecho de plástico duro con orificios de aire.
- Asegúrese de que el chupete sea apto para lavavajillas. Siga las instrucciones del chupete y hiérvalo o lávelo en el lavavajillas antes de que su bebé lo utilice. Asegúrese de quitar el agua presionando la tetina con las manos limpias. De lo contrario, el agua caliente en el interior podría quemar la boca de su bebé. Límpielo de esta manera con frecuencia hasta que su bebé tenga 6 meses de vida, de modo que no esté expuesto a gérmenes. Después de ese tiempo, simplemente puede lavarlo con jabón y enjuagarlo con agua limpia.
- Compre algunos chupetes adicionales. Los chupetes suelen perderse o caerse al suelo o en la calle cuando más se necesitan.
- No utilice la tetina de un biberón como chupete. Si el bebé succiona fuerte, es posible que la tetina se salga del anillo y lo atragante.
- Con el tiempo, los chupetes se rompen. Algunos fabricantes tienen fechas de vencimiento para los chupetes. No guarde los chupetes después de esa fecha. Revíselos de vez en cuando para ver si la goma ha cambiado de color o si se ha roto. De ser así, cámbielos.
¿Cuándo el uso del chupete y la succión del pulgar y de los dedos se convierte en un problema?
Si su hijo succiona fuertemente un chupete, su pulgar o sus dedos, después de los 2 a 4 años de edad, este comportamiento puede afectar la forma de su boca o la manera en que se alineen sus dientes. Si su hijo deja de succionar un chupete, su pulgar o sus dedos antes de que crezcan sus dientes frontales permanentes, existe una buena posibilidad de que su mordida se corrija por sí sola. Sin embargo, si la mordida no se corrige por sí sola y los dientes definitivos superiores están sobresalidos, es posible que se necesite tratamiento de ortodoncia para volver a alinear los dientes y ayudar a prevenir que los dientes frontales se rompan.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a que deje de usar el chupete o el hábito de succionarse el pulgar o los dedos?
Como primer paso para tratar los hábitos de succión de su hijo, ignórelos. La mayoría de las veces, los niños dejarán de hacerlo por sí solos. Las palabras rudas, la burla o el castigo pueden molestar a su hijo y no son una manera eficaz para eliminar los hábitos. En lugar de eso, intente lo siguiente:
- Elogie y recompense a su hijo cuando no se succione el pulgar o no use el chupete. Las tablas de recompensa, los premios diarios y los recordatorios discretos, especialmente durante el día, también son muy útiles.
- Si su hijo utiliza la succión para calmar el aburrimiento, mantenga sus manos ocupadas o distráigalo con cosas que le resulten divertidas.
- Si ve cambios en el techo de la boca (paladar) de su hijo o en la manera en que se alinean los dientes, hable con su pediatra o dentista pediátrico. Existen dispositivos que se pueden colocar en la boca y hacen que resulte incómodo succionarse un dedo o el pulgar.
- Independientemente del método que pruebe, asegúrese de explicárselo a su hijo. Si hace que su hijo tenga miedo o esté tenso, interrúmpalo de inmediato.
La buena noticia es que la mayoría de los niños dejan sus hábitos de succión al poco tiempo de empezar la escuela. Esto se debe a la presión de sus compañeros. Si bien su hijo podría seguir utilizando la succión como una manera de irse a dormir o de calmarse cuando está molesto, esto, generalmente, se hace en privado y no es perjudicial. Presionar demasiado a su hijo para que deje sus hábitos puede causar más daño que beneficios. Tenga la seguridad de que, con el tiempo, su hijo dejará el hábito por sí solo.
Disclaimer
La información que se incluye en esta publicación no se debe usar como reemplazo de la asistencia médica y los consejos de su pediatra. Es posible que existan variaciones en el tratamiento que su pediatra pueda recomendar de acuerdo con los hechos y circunstancias individuales.
Translation of Thumbs, Fingers, and Pacifiers
© 2019 American Academy of Pediatrics. Todos los derechos reservados.