Definición
Ansiedad es otra palabra para referirse a sentirse preocupado o asustado. Si su hijo se siente ansioso, es posible que no pueda decírselo. Es posible que su hijo se sienta mal o enfermo sin saber por qué, o que usted note que parece estar inquieto o cansado.
Estos son algunos otros signos comunes de ansiedad en los niños.
- Sensación de que su corazón se acelera
- Sudoración o rubor
- Temblores o sensación de malestar estomacal
- Sensación de mucho frío o calor
- Problemas para prestar atención o permanecer sentado
- Tocar la zona de la entrepierna (para niños pequeños)
Es normal que los niños de cualquier edad se sientan ansiosos a veces, por ejemplo, cuando tienen un examen importante en la escuela o deben hablar delante de un grupo de personas. Sin embargo, si la ansiedad de su hijo se interpone en sus actividades normales, como dormir solo por la noche, jugar al aire libre o ir a la escuela, es posible que necesite algo de apoyo adicional.
La buena noticia es que hay cosas que puede hacer para ayudar a evitar que su hijo se sienta ansioso y ayudarlo a manejar las preocupaciones cuando surjan.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo en casa? 🔗
Estos consejos son útiles para todos los niños, pero pueden ser especialmente útiles para los niños con ansiedad. Criar hijos es una labor ajetreada, así que utilice su criterio para determinar cuáles sugerencias tienen más sentido para su familia.
Conéctese con su hijo
- Dedique tiempo para pasar con él todos los días sin televisión ni otros medios de comunicación. Incluso solo 10 minutos al día pueden marcar una gran diferencia. Pruebe a trabajar en el jardín o cuidar las plantas del interior, dibujar o dar un paseo en bicicleta.
- Elogie a su hijo y haga que se sienta bien consigo mismo. Por ejemplo, dígale "¡Hiciste muy bien esa tarea!" o "Gracias por ayudarme a lavar la ropa. Tengo mucha suerte de contar con tu ayuda".
- Averigüe qué es lo que preocupa a su hijo, porque el estrés puede hacer que se sienta ansioso. Cosas como el acoso escolar, el divorcio o la muerte de un familiar pueden hacer que un niño se sienta ansioso. Es posible que su hijo necesite ayuda adicional para manejar problemas como estos.
Ayude a su hijo a aprender a manejar los miedos
Cuando su hijo esté tranquilo, inicie una conversación sobre las cosas que puede hacer para controlar los miedos y las preocupaciones cuando surjan. Por ejemplo, dígale que puede:
- Practicar la respiración profunda y la relajación muscular.
- Usar un diálogo interno positivo (por ejemplo, "Puedo intentarlo" en lugar de "No puedo hacerlo").
- Piense en un lugar seguro, como su dormitorio o su lugar favorito al aire libre..
Además,
- Exponga gradualmente a su hijo a objetos o actividades que le causan temor.
- Elogie y recompense el comportamiento valiente: el objetivo es sobrellevar el miedo, no evitarlo.
Desarrolle hábitos saludables
- ¡A moverse! Anime a su hijo a mantenerse físicamente activo durante al menos una hora todos los días. Esta actividad puede incluir jugar al aire libre, unirse a un equipo deportivo o a una actividad en la YMCA, ir en bicicleta o a pie a la escuela, o bailar en casa con su música favorita.
- Coman alimentos sanos. Consuman comidas saludables todos los días, como frutas y verduras, granos integrales y alimentos con proteínas. ¡Recuerden desayunar!
- Duerman lo suficiente. Los niños en edad escolar necesitan dormir de 9 a 12 horas todas las noches, y los adolescentes necesitan de 8 a 10 horas.
- Limite el tiempo que pasan frente a pantallas. Intente que pasen menos de 2 horas al día frente a una pantalla para entretenerse. Evite los programas de televisión, los videojuegos y las películas de miedo o violentas.
- Establezca rutinas familiares. Mantenga un horario regular para jugar, comer y acostarse. Saber qué esperar puede ayudar a su hijo a sentirse seguro y protegido.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo en la escuela?
Es posible que a los niños les resulte difícil concentrarse en la escuela o incluso asistir cuando se sienten preocupados. Si su hijo tiene problemas en la escuela, pruebe estas formas de ayudarlo.
- Dígale a su hijo con suavidad pero con firmeza por qué es importante ir a la escuela.
- Hable con los maestros de su hijo y con el consejero escolar sobre qué hacer si su hijo pide irse temprano de la escuela a casa.
- Si cree que el estrés familiar o la presión para que le vaya bien en la escuela están molestando a su hijo, dígale que está haciendo un buen trabajo y que se siente orgulloso de él.
- Ayude a su hijo a establecer metas realistas para la escuela. Si se fijan metas que son demasiado difíciles de cumplir, es posible que se sientan peor consigo mismos.
- Recuérdele a su hijo que puede tomar medidas para controlar sus preocupaciones. Por ejemplo, puede pensar qué hacer con anticipación para manejar una situación estresante.
- Recompense los comportamientos valientes de su hijo en la escuela. Pasar tiempo realizando actividades divertidas con los padres es una recompensa muy poderosa.
Recuerde que usted es quien mejor conoce a su hijo.
Ya sea en la escuela o en el consultorio del médico, usted es el defensor principal de su hijo. No dude en hablar en nombre de su hijo.
¿Cuándo debo volver al médico?
Si la ansiedad de su hijo no desaparece o empeora, vuelva a comunicarse con el médico. Usted y el médico pueden elaborar un plan para probar nuevos enfoques o estrategias con su hijo.
Es especialmente importante hablar con el médico si:
- Su hijo comienza a experimentar otros problemas de conducta, como timidez.
- Sucede algo aterrador en la vida de su hijo que puede empeorar su ansiedad, como una lesión o la muerte de un familiar.
- Sospecha que la ansiedad de su hijo está afectando a otra afección médica (por ejemplo, si el asma de su hijo empeora con la ansiedad).
El médico también puede ayudar a decidir si consultar a un especialista puede ayudar. Por ejemplo, un tipo de terapia llamada terapia cognitivo-conductual puede ser útil para los niños con ansiedad.
Reserve tiempo para su propio cuidado también
La crianza de los hijos puede ser estresante. Si se siente abrumado, no dude en pedir apoyo a familiares, amigos cercanos, servicios sociales o su comunidad religiosa. Los niños se dan cuenta del estrés y las preocupaciones de los adultos, por lo que obtener apoyo para usted mismo también puede ayudar a su hijo.
Para obtener más información sobre la ansiedad infantil y lo que puede hacer para ayudar, visite estos sitios web.
- American Academy of Pediatrics (Academia Estadounidense de Pediatría, AAP) HealthyChildren.org: www.HealthyChildren.org
- Academia Estadounidense de Psiquiatría de Niños y Adolescentes: www.aacap.org
- Asociación Estadounidense de Psicología: www.apa.org
- Alianza Nacional para Enfermedades Mentales: www.nami.org
- Federación Nacional de Familias para la Salud Mental Infantil: www.ffcmh.org
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